jueves, 25 de febrero de 2010

Un grupo con identidad.


En medio de tantas construcciones de las que somos parte, de los aspectos más agradables que se encuentran es el poder compaginar con otras personas en algunos sentidos; claro ejemplo es ser partícipe de un grupo al que me hoy me encuentro unida, el de maestría; verdaderamente ha sido y es un placer el poder conocer a mis compañeros y mejor aún cuando el circulo de amistades se agranda, lo cual no siempre es posible, debido a las diversas actividades y compromisos que cada uno tiene, pero a pesar de, nos hemos dado la oportunidad de convivir en grupo, claro ejemplo de ello fue la representación teatral que hicimos el semestre pasado acerca del “Eterno femenino” de Rosario Castellanos, bonita experiencia, además de entender lo que pasa con nosotros y en nuestro entorno; reaprendí a trabajar en equipo, donde un primer interés fue el aprobar una materia, y posteriormente crear lazos de amistad, lo que implica una serie de comportamientos de unos para con otros, y en este caso ha sido maravilloso.

Como grupo M002, porque así fuimos catalogados el semestre pasado, quizás no seamos una religión secular, ya que nuestro paso por la maestría como grupo es temporal, eso espero ja, ja, ja… (no sea que alguno quiera hacer un “doctorado en maestría”), pero lo que sí me queda claro es que una característica que nos identifica es: el llegar a ser maestros en derecho.

De las pocas o muchas cosas que se viven en este mundo, que se traducen en bonitas experiencias, es la unidad que se ha alcanzado en el grupo del que he venido comentando, como ejemplo tenemos el compartir la información y libros por mail, así como el hecho de que la mayoría decidimos inscribimos con los mismos profesores, y otros aunque quisieron hacerlo, ya no alcanzaron cupo, y ello no ha sido impedimento para seguir contactándonos.

Como dijo el Dr. Arce en una de las clases pasadas “aprovechen esta oportunidad de hacer amigos, porque después no será fácil hacerlos”, palabras que constituyen una hipótesis casi comprobada, pues al salir de la licenciatura, los amigos que se formaron siguen, pero en el plano laboral los intereses al ser mayormente distintos no siempre propician el clima para entablar una amistad.

La realidad de cada uno de nosotros coexiste aún cuando estamos integrados a la comunidad denominada inicialmente M002, y seguirá fortaleciéndose o no, dependiendo de la disposición que sigamos teniendo de aprender de la vida, así como del derecho, por qué no.

martes, 23 de febrero de 2010

Religión, una construcción necesaria.

Cuando conversas se puede hablar de cualquier tema que se desee, pero se dice que si no se quiere entrar en controversia y no llegar a ningún lado, no se deben tratar temas de religión, política y futbol ¿será un tabú? así las cosas, en esta nota sólo se expondrán y comentarán algunas cuestiones en torno a lo que se ha entendido por religión, así como el significado social, entendido como ¿cuál es su función en la sociedad?

Una acepción del término religión es: "conjunto de creencias o dogmas a cerca de la divinidad, de sentimientos de veneración y temor hacia ella, de normas morales para la conducta individual y social y de practicas rituales, principalmente la oración y el sacrificio para darle culto".[1]

Religión implica creer en dogmas relacionados con la existencia de una divinidad, que puede entrañar una pluralidad de seres divinos, así como en el hecho de acatar cierto tipo de reglas que se originan en el seno de cada creencia, aunado a una serie de procedimientos conocidos como ritos o rituales que lo hacen místico en ocasiones o que simplemente se traduce en una serie de costumbres que deben ser, porque así es el dogma. El ser humano ha manifestado su necesidad de creer en un ser supremo ya que así se siente seguro, en paz con un ser superior. En muchas religiones existen tótems que representan la divinidad en cuestión, de tal forma que la imaginación ha creado una serie de figuras diversas al grado de encontrar un número bastante cuantioso de ellos en el mundo. El aspecto religioso tiene que ver con el tiempo y el espacio, con la cultura y la idiosincrasia de los pueblos.

La religión desemboca en un ser divino que prescribe ciertos mandatos que se deben seguir por el que dice creer en ellos, y que de no hacerlo una sanción primera será simple y sencillamente la exclusión de esa comunidad, sea formal o tácitamente. Para mucha gente la religión misma se ha convertido en un símbolo que viene de dios, y que puede calmar los instintos perversos del hombre, de tal forma que lo haga más sensible a la existencia de otro semejante.

Algunos opinan que la religión es un mal para la sociedad, que enajena las conciencias, y razón pueden tener si es que vemos el caso de los que han matado en nombre de dios; ¿de qué dios estamos hablando?, ¿cuál es el fin de la divinidad aludida en cada religión? No se ha logrado el consenso como en muchas otros aspectos, ¿qué religión es la correcta o qué es mejor, creer en dios o no?, hay realidades distintas en torno al tema.

Un significado social que tiene la religión es que el hombre al ser miembro de una comunidad religiosa o simplemente creer en dios, puede sentir satisfecho su interior, su conciencia quizás se encuentre en paz y por lo tanto le hace en algunos casos más conciente de que con sus acciones u omisiones coadyuvará al desarrollo de su propia persona y del que le rodea, así como sistema de reglas la función social que cumple le religión es el de regular las pasiones del ser, esto si vemos el lado positivo que puede tener la religión, pero también tiene su lado negativo, lo cual implica ir contra lo racionalmente aceptado y contra la misma naturaleza como es el privar de la vida a otro por una creencia que se asume debe ser.

La religión es una construcción social, de la cual ha echado mano el hombre para satisfacer sus necesidades espirituales, y como comenté, puede serle útil en virtud de darle certeza, pero también como un símbolo de exclusión y determinación sobre otros.
[1] http://www.monografias.com/trabajos11/temrelig/temrelig.shtml#CONCEP, consulta del 15 de febrero de 2010

El señorío ¿de quién?

En el film “El señor de las moscas” resulta ser la historia de niños y adolescentes que por circunstancias ajenas a ellos, llegan a una isla en calidad de náufragos, sin que entre ellos se encuentre un adulto que se encargue de liderar sus actos, o bien con mayor experiencia en la vida; sólo se encuentran con los conocimientos que a sus cortas edades han adquirido.

Lo primero que podríamos pensar si imaginariamente nos ubicamos en una situación similar es ¿cómo sobrevivir? en un lugar donde prácticamente no hay tecnología a la cual nos hemos estado acostumbrando, y ya no digamos tanto, ¿cómo hacerlo donde aparentemente el alimento se tendrá que conseguir de forma no usual a la que estamos acostumbrados? A un grupo de niños-adolescentes, les preocupaba si podrían ser rescatados y cómo protegerse de los peligros ante el cual se encuentraban, porque claro sentían miedo, pero otra parte de ellos en busca del alimento tienden a cazar y se expresan en el sentido de que están en un lugar donde no sientían la presión de nadie como autoridad, por lo que entran en choque con la organización que un inicio intentó llevarse y así poder buscar la forma de ser rescatados. El diálogo y la forma civilizada de arreglar las cosas no funcionó, no hubo la misma disposición en todos para seguir reglas que bien podían haber experimentado si era funcional o no, la mayoría impulsado por el temor decidió seguir el uso de la fuerza.

Es interesante ver que muchas de las veces actuamos en aras del miedo, lo cual nos conlleva a realizar actos verdaderamente irracionales, no inteligentes o bien, previamente premeditados cuando se puede estar en ventaja de otro, es entonces cuando el poder se impone a través de la fuerza. Para sofocar el miedo, se construyen tótems, ritos, mitos, etcétera, en el caso que nos ocupa por el decir de otro se quedó la idea de que existía un ser temerario en la isla, por lo que en otro náufrago surge la idea de dar tributo para aplacar su ira, y acuerdan ofrendar alimento.

La naturaleza del ser humano es compleja, y más cuando estamos frente a lo que no podemos preveer, no sabemos cómo reaccionaremos en determinados supuestos, y es hasta entonces que podemos descubrir algo que ha estado oculto dentro de nosotros.

El derecho y el Estado, son construcciones sociales entre otras figuras, creados para dar seguridad, son formas que han surgido de forma civilizada en unos casos y en otros no, a las que hemos llegado y que se han aceptado tácitamente porque creemos que son formas en que podemos convivir unos con otros, sino de forma correcta, por lo menos con un mínimo de certeza que nos permite disfrutar de lo que la naturaleza misma nos da, así como de las relaciones de unos con otros. En el caso mostrado en “El señor de las moscas” predominó la naturaleza irracional del hombre: la fuerza, esto mismo ha sucedido en algunas partes del mundo, la ley del más fuerte sobre la del débil, como en la selva, así que no necesariamente lo racional es lo que hace la diferencia entre el hombre y el resto de la naturaleza, sino sus símbolos, la forma en cómo se desenvuelve en su interacción con el prójimo.

Como último, cabe preguntarse ¿a quién le asignamos señorío, o a quién se le reconoce, quién debe gobernar o dirigir en una comunidad, existe necesidad de que esto sea así? o ¿la barbarie es mejor?, en la película el miedo se convirtió en su señor, había que cuidarse de un supuesto ser y como uno dijo hay que hacer esto para esto otro, entonces las circunstancias favorecían el sentimiento de poder de uno. A la fecha lo que aparentemente ha “funcionado” considero, ha sido vivir bajo algún tipo de reglas, llámense de tipo jurídico, moral o religioso; menciono que el daño causado pudiera ser menor que vivir sin reglas, lo que no siempre es así, porque al hablar de religión por ejemplo, es un terreno espinoso que ha traído consigo la muerte de muchos en nombre de dios.

lunes, 22 de febrero de 2010

Reflexionando nuevamente sobre la realidad.


Partiendo de la existencia de varias realidades a la vez, lo que ha estado sucediendo en algunos lugares de México con respecto a la lluvia, ésta ha causado estragos como inundaciones y deslavamientos de tierra, lo cual ha implicado verdaderas desgracias a familias enteras, sobre todo se ha dejado ver en aquéllas zonas donde se encuentran los asentamientos humanos más pobres económicamente, tal pareciera que hasta la naturaleza misma se empeña en que el pobre no sólo tenga esta condición, sino que sea miserable.

En días pasados el Ejecutivo Federal, con relación a lo vivido en una de las zonas afectadas como es Angangueo (Michoacán), expresó las siguientes palabras:

“Es tan importante lo del pueblo mágico, no porque se le haya ocurrido a alguien, no es porque querramos creer que con eso la gente va a estar feliz. No, pueblo mágico es porque nos ayuda a que los turistas de México y el mundo sepan que este pueblo es distinto y es más bonito que otros”, defendió el Presidente
[1]

La gente ante estas declaraciones, se manifestó en sentido distinto, ya que un pueblo del cual no se había oído mencionar con tanta importancia, ahora resulta que hasta en algo mágico debe transformarse, de tal suerte que el turismo sea captado por ese poblado, no digo que México por su territorio no se pueda admirar y disfrutar, ya que la naturaleza ha sido bondadosa y podemos deleitarnos en una gran diversidad de ecosistemas, pero el caso no es ese, sino que en situaciones como las que se han estado observando y viviendo por los habitantes de ese lugar llamado Angangueo, nos muestra una de las caras de la moneda: la destrucción del patrimonio de las familias; y el que no está en sus zapatos, puede ver las cosas de diferente forma, lo cual resulta absurdo para esa gente que en momentos tan difíciles como los que están pasando se piense en lo mágico de un lugar, antes que en restaurar lo que han perdido los pobladores, y ver la viabilidad de que puedan seguir habitando dicho lugar. Cada quien en su realidad, y cada quien como le va en la feria. A veces resulta fácil decir desde afuera, pero estar en su realidad no creo que lo sea tanto.



[1] http://www.eluniversal.com.mx/primera/34443.html, consulta del 5 de febrero de 2010.

sábado, 13 de febrero de 2010

Lo que esperas no siempre es lo que recibes, mejor cuando es mayor a lo que esperabas.


Como alumno de la maestría en derecho, se espera que los profesores sigan impartiendo sus clases con la misma formalidad como en licenciatura, y no porque precisamente ese sea el deseo del alumno, sino porque así hemos sido formados, pero afortunadamente y para sorpresa de muchos entre las que me cuento, en la matería de Teoría Jurídica Contemporánea II, impartida por el Dr. Federico Arce Navarro la dinámica de aprendizaje es notablemente diferente, lo cual hace bastante interesante las clases. El análisis y la crítica sobre la información que cada uno de trae en su bagaje, resulta ser que mucha de ella no ha sido del todo analizada; cada aspecto que ha capturado nuestro cerebro, simple y sencillamente se guarda, de tal forma que sólo nos concretamos a repetir el conocimiento.
Es gratificante que la Universidad cuente con maestros analíticos, que pongan las cartas sobre la mesa e impulsen al alumno para hacer lo mismo: "pensar". En una de las primeras clases se nos indicó que dibujaramos un unicornio y todos procedimos a realizarlo; al comparar lo que cada uno había plasmado oh! sorpresa, todos lo habíamos dibujado con un cuerno, sin importar nada más del resto de la figura, coincidiamos en que debía tener un cuerno; ejercicio que deja abierta una pregunta: existieron los unicornios? y si no existieron, cómo es que tenemos una preconcepción de la figura?, lo cual nos llevó a cuestionarnos sobre qué es lo real?, mucha filosofía para mí en unos minutos. No me había detenido a analizar que la palabra "realidad" que se encuentra en el vocabulario de la mayoría de la gente tenga tal profundidad. En un primer momento al responder con nuestro lado intuitivo inmediatamente podemos contestar que sí, la realidad existe, pero se da lugar a más preguntas como cuál realidad es la que existe?, existe una sóla realidad o varias realidades?, y sí son varias, coexisten simultáneamente?. La realidad, coincidimos al final del día en que es "una construcción social".
Como seres humanos somos frágiles, vulnerables y no escontramos solos, por lo que sentimos miedo, y esto mismo nos lleva a realizar una serie de construcciones a través de símbolos, que nos den certeza, y entre más nos acerquemos a ella, más seguridad tenemos, así el consenso es una construcción por medio de la cual acordamos una realidad.
Interesante seguirán siendo todos y cada uno de los aspectos que se irán desarrollando a lo largo de cada clase, creo que a todos nos quedará más claro el contenido de la materia, entre muchos otros aspectos más.
Bienvenaventurado es el día en que decidí estudiar una maestría, benaventurados los maestros como el que hoy nos imparte la materia de Teoría Jurídica Contemporánea, bienvenidos todos los que decidan comentar en este espacio.